La crecida de los ríos Pilcomayo y Bermejo inundó varias localidades de Chaco y Salta, dejando a comunidades enteras totalmente aisladas sin acceso a luz, agua y comida. Se calcula que ya hay unos 15 mil autoevacuados, además de casas destruidas y caminos anegados.

Las intensas lluvias y el consecuente desborde de los ríos afectaron especialmente a las comunidades Wichí, Qom y Toba de Salta, ubicadas en localidades como Las Vertientes, Larguero y Rivadavia Banda Sur, dejándolas incomunicadas y sin acceso a alimentos, agua potable y otros recursos básicos, ya que los caminos rurales están intransitables y varias rutas provinciales permanecen bloqueadas, complicando el traslado de asistencia y la evacuación de los damnificados.

“Venimos atravesando momentos muy duros, críticos debido al desborde del rio Bermejo”, expresó al portal ANRed Dalmiro Acosta, miembro y referente de la comunidad wichí San Felipe, en el departamento Rivadavia de Salta. “Hasta ahora no tenemos novedad del Gobierno, no asistieron a la comunidad y realmente nos complica en todo la situación”, agregó.

Posibles brotes de enfermedades

Los gobiernos provinciales de Salta y Chaco han advertido sobre los posibles brotes de enfermedades relacionadas con las inundaciones y el estancamiento de agua, como el dengue y la leptospirosis. Se movilizaron equipos sanitarios para proporcionar atención médica y distribuir suministros en las áreas afectadas.

En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) alertó nuevamente sobre la probabilidad de precipitaciones en la región, lo que podría agravar el panorama en las próximas horas.